No norte de Vietnam, moi preto da fronteira con China e a
uns 60 km de Lao Cai e 80 de Sapa, atópase unha pequena e remota aldea chamada
Bac Ha na que se celebra un mercado impresionante.
En el norte de Vietnam,
muy cerca de la frontera con China y a unos 60 km de Lao Cai y 80 de Sapa, se
encuentra una pequeña y remota aldea llamada Bac Ha en la que se celebra un
mercado impresionante.
Es una zona montañosa en
la que conviven multitud de etnias diferentes, como la Hmong, la Miao, la Tay,
la Dao, Nung, La Giay o la Muong, que cada domingo bajan de las montañas a este
mercado, convirtiéndolo en el mercado étnico más grande de la provincia de Lao
Cai y uno de los más interesantes de todo Vietnam.
Desde moi cedo tes a oportunidade de ver como os nativos,
vestidos cos seus traxes tradicionais, transportan os produtos e animais cos
que comerciarán no mercado desde as 6 da mañá até as 2 da tarde, aproximadamente;
chaman especialmente a atención os espectaculares traxes feitos con cáñamo e
tiras bordadas que levan as Mulleres Hmong, cheos de motivos de cores.
O mercado está dividido por áreas de animais domésticos,
produtos de artesanía, roupa, un apartado enorme para cabalos, zona de comidas,
etc. Pero non só asisten para comerciar, senón que aproveitan tamén para
coincidir con familiares e amigos cos que conversar, facer vida social ou comer
un dos pratos máis típicos: o “Thắng cố”, unha sopa
tradicional dos Mong preparada con vísceras de cabalo, sementes e outros
ingredientes.
Neste mercado mergúllaste nas tradicións, nas identidades
culturais e na amabilidade dos seus aldeáns, sempre dispostos a compartir
contigo un viño de arroz.
Estas fotos tomáronse na zona dedicada á venda de carne.
Desde muy temprano tienes
la oportunidad de ver como los nativos, vestidos con sus trajes tradicionales,
transportan los productos y animales con los que comerciarán en el mercado
desde las 6 de la mañana hasta las 2 de la tarde, aproximadamente; llaman
especialmente la atención los espectaculares trajes hechos con cáñamo y tiras
bordadas que llevan las Mujeres Hmong, llenos de motivos de colores.
El mercado está dividido
por áreas de animales domésticos, productos de artesanía, ropa, un apartado enorme
para caballos, zona de comidas, etc. Pero no sólo asisten para comerciar, sino
que aprovechan también para coincidir con familiares y amigos con los que
conversar, hacer vida social o comer uno de los platos más típicos: el “Thắng cố”, una sopa
tradicional de los Mong preparada con vísceras de caballo, semillas y otros
ingredientes.
En este mercado te
sumerges en las tradiciones, en las identidades culturales y en la amabilidad
de sus lugareños, siempre dispuestos a compartir contigo un vino de arroz.
Estas fotos fueron tomadas
en la zona dedicada a la venta de carne.
Haberá quen diga que se necesitaría a cor para apreciar mellor este mercado, pero agradezo a habitual sensibilidade do autor para evitarnos a crueza de ver animais cruelmente despezados. Non o imaxino a vostede, Carlos, comendo unha desas cabezas de porco, arrepiantes ata en branco e negro.
ResponderEliminarSaúde.
Estupendo reportaje. Un saludo-
ResponderEliminarEs algo parecido a los mercados africanos. A qué impresiona?
ResponderEliminarAunque los vietnamitas son más simpáticos según mi experiencia.
Un saludo :-)
En este caso, y aun tratándose de comida, no se me ha abierto el apetito para nada....
ResponderEliminarMuy buenas, Carlos.
¡Impresionante! Gracias Carlos por aproximarnos a otras realidades a través de tus fotografías. Enriquece seguir tu blog. Un abrazo
ResponderEliminar¡Impresionante! Gracias Carlos por aproximarnos a otras realidades a través de tus fotografías. Enriquece seguir tu blog. Un abrazo
ResponderEliminarReportaje con impresionante testimonio donde podemos diferenciar entre nuestra excesva pulcritud alimentaria y su falta de higiene, dos mundos diferentes y los dos del mismo tiempo. Felicidades
ResponderEliminarHas vuelto a elevar el listón de la calidad de tus reportajes.....y ya estaba realmente alto.
ResponderEliminarEstupendos documentos gráficos, Carlos.
Me sigue admirando tu alta cualidad humana como viajero del mundo.
Enhorabuena!!!
Impresionante tus fotografias siempre con alta cualidade. Estupendo reportaje social, Carlos. Abrazos
ResponderEliminarPrefiero ver esta realidad que no la hipocresía de occidente, es familiar, real y educativa mejor que McDonals donde venden no se sabe que de laboratorio. Genial y cuando he visto los pesos me ha recordado mi niñez.
ResponderEliminarnos transportas a otros ambientes, a otras culturas, y sabes captar el espíritu de las gentes que dan forma a tus reportajes desde la honestidad y la belleza. Gracias..)
ResponderEliminarSe agradece el blanco y negro. No sé si sería capaz de mantener la mirada con color. Espectaculares.
ResponderEliminarSo maravillosas tus publicaciones, en todo sentido.
ResponderEliminarUn abrazo
Yvette
Muy interesantes tus reportajes
ResponderEliminarBuenas Noches
ResponderEliminarmi apreciable amigo; que hermoso trabajo en el me haces sentir en acto presencial y transportarme en ese movimiento de vida. Tu trabajo es magnifico con un sello muy tuyo.
Sinxelamente maravillosas. Unha aperta
ResponderEliminarGosto imensamente de suas imagens. Que câmera você usa? São de uma qualidade impressionante. Abraço
ResponderEliminarEs un mercado bastante crudo, al ver esas cabezas y vendiendo la carne, bueno es la realidad, interesante reportaje. Saludos amigo te mando un abrazo
ResponderEliminarImpresionante. Sólo el buen hacer del fotógrafo y su magnífico enfoque hacen que no podamos dejar de mirar.
ResponderEliminar!! maravillosas!!
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