Ouidah é unha pequena
cidade da república de Benín, tristemente coñecida por ser un dos portos craves
para o tráfico de escravos de África occidental.
Ouidah es una pequeña
ciudad de la república de Benín, tristemente conocida por ser uno de los
puertos claves para el tráfico de esclavos de África occidental.
Nesta cidade hai un
bonito, pequeno e algo desacougante bosque, coñecido como o bosque sacro de Kpassé
no que, ademais dalgunha ruína e zonas tabú que non poden ser pisadas, atopaste
cunha cantidade inxente de enormes árbores, moitos deles considerados reencarnacións
de persoas importantes da cidade. Entre eles destaca un especial, un Iroko
sacro e centenario no que os crentes do vudú depositan as súas ofrendas e demandan
a súa protección. Segundo a lenda, nesta árbore reencarnouse o rei Kpasse -o rei fundador do pobo no século XIV- para fuxir do exército de Dahomei, que
pretendía escabezalo.
En esta ciudad hay un
bonito, pequeño y algo inquietante bosque, conocido como el bosque sagrado de Kpassé
en el que, además de alguna ruina y zonas tabú que no pueden ser pisadas, te
encuentras con gran cantidad de enormes árboles, muchos de ellos considerados reencarnacións
de personas importantes de la ciudad. Entre ellos destaca un especial, un Iroko
sagrado y centenario en el que los creyentes del vudú depositan sus ofrendas y
demandan su protección. Según la leyenda, en este árbol se reencarnó el rey Kpasse -el rey fundador del pueblo en el siglo XIV- para huir del ejército de Dahomey, que pretendía
decapitarlo.
Segundo penetras no
bosque, atópaste coa estatua do deus Legba, representado por un mozo con cornos
e un falo de dimensións considerables.
Según penetras en el
bosque, te encuentras con la estatua del dios Legba, representado por un joven
con cuernos y un falo de dimensiones considerables.
As árbores dan sombra a
unha multitude de estatuas que representan a outros tantos deuses do vudú.
Los árboles dan sombra
a una multitud de estatuas que representan a otros tantos dioses del vudú.
Outras curiosas
esculturas realizadas por artistas locais con ferros, cables, cadeas de
motocicletas, torcas e materiais de todo tipo, comparten o espazo.
Otras curiosas
esculturas realizadas por artistas locales con hierros, cables, cadenas de
motocicletas, tuercas y materiales de todo tipo, comparten espacio.
molt interessants,de vegades no donem el suficient valor a les fotos en blanc i negre, felicitats
ResponderEliminar!Awesome pictures today! =0)
ResponderEliminarUn nuevo trabajo muchísimo interesante sobre los lugares menos conocidos del mundo. El vudú, sus particularidades e intrincados meandros, los misteriosos bosques, imágenes y dioses. Y tu mirada apurada y siempre atenta a las manos de los hombres, a su cultura ya la forma como la expresan. Un conjunto fotográfico apurado, fuerte y donde la mirada se prende y pierde. Felicitaciones, Carlos. Tus trabajos son obras de arte que es un placer observar y absorber despacio y con tiempo. Un Beso
ResponderEliminarSin duda, un bosque mágico, con el testimonio de impresionantes fotografías dando a conocer el mundo hermético de ciertas tribus indigenas.
ResponderEliminarFelicidades Carlos, siempre un placer ver tus imágenes tan reveladoras de otras culturas. Saludos!
ResponderEliminarMuito bonitas. E todas com seu significado.
ResponderEliminarUn lugar increíble. Magníficas fotos, así como la narración que las acompaña.
ResponderEliminarQue beleza contém aquilo que se faz a branco e preto!...
ResponderEliminarMais ainda quando nos levas a un lugar assim, diria que imprevisível, mas apaixonante.